Tipos de custodia en Estados Unidos

El proceso de divorcio suele ser más complejo si se encuentran hijos menores de edad de por medio, y esto se debe a que las leyes estadounidenses prestan especial atención al bienestar de los infantes. Asimismo, la decisión final dependerá de cómo transcurrió y finalizó la relación.

Sin embargo, también debemos destacar que existe la posibilidad de que haya un proceso legal sobre la tutela de los hijos si los padres no están casados, y de ello también hablaremos en este artículo. No hay dudas de que conocer los tipos de custodia en Estados Unidos es sumamente importante.

¿Cómo se define la custodia?

Como sucede con los casamientos y los divorcios en Estados Unidos, la custodia de los menores es asunto de cada estado y, por ende, las reglas pueden variar dependiendo del lugar donde se debata este punto.

Sin embargo, todas las cortes de menores siguen un proceso en común: evaluar las condiciones de los padres antes de dictaminar cómo será la crianza y la manutención de los hijos. En este sentido, a continuación te dejaremos los puntos más destacados que evalúan las leyes de USA.

Aspectos a evaluar por un tribunal

Estabilidad económica y mental

Los tribunales estadounidenses tienen el derecho de evaluar, de manera exhaustiva, cuál es la condición económica y mental de cada padre antes de decidir cómo será la patria potestad.

Dentro de este punto es especialmente relevante determinar cuáles son los sueldos de cada uno de ellos, si tienen vivienda fija o no, los beneficios que pueden ofrecer sus trabajos a sus hijos y mucho más.

Asimismo, en esta evaluación se tiene en cuenta la capacidad que tienen los progenitores de costear la educación, el transporte, la seguridad médica e incluso las actividades extracurriculares de los niños.

Todo esto sin dejar a un lado los análisis mentales que aseguren que los padres están aptos para tomar decisiones beneficiosas para los infantes. Dependiendo de los resultados, es totalmente posible que el tribunal redirija a uno de los progenitores (en caso de que esté afectado) a una consulta con un profesional de la salud mental.

Relación con los padres

Aunque anteriormente los jueces decidían, casi de inmediato, que los menores tenían mejores relaciones con sus madres, con el paso del tiempo las leyes han cambiado y, por ende, este hecho no se asume de manera automática.

Es por ello que el trato de los infantes con sus progenitores es otro tema que debe evaluarse de forma minuciosa. Dentro de este análisis también se toma como punto de partida la relación que tuvieron los hijos con sus padres durante el matrimonio.

Si fue un trato distante y carente de conexión sentimental, es poco probable que esto cambie después de la separación, y es algo que el tribunal debe considerar.

Por supuesto, en caso de que exista más de un niño dentro del matrimonio, los jueces tendrán que evaluar por separado cómo fueron las relaciones de cada uno de ellos. Sin embargo, en estos contextos lo más común es que se procure la unión permanente de los infantes.

Deseos del niño y de los padres

Los estados de USA también tienen leyes que validan las opiniones de los menores durante el proceso de coordinar los términos de la custodia, pero hay ciertas condiciones que se aplican en este punto. La más importante de todas es, por supuesto, la edad de los infantes y sus capacidades mentales.

Asimismo, es posible que los padres tengan entrevistas con los funcionarios encargados del caso. Este es uno de los mejores métodos para que los tribunales conozcan los deseos, las opiniones y los intereses respecto a la crianza de sus hijos.

Tutela para padres no casados

Ahora bien, no podemos dejar a un lado que muchos padres no contrajeron matrimonio y, sin embargo, quieren llegar a acuerdos legales sobre la tutela de sus hijos. Esto es totalmente posible, y para ello igual se necesitará contar con la aprobación de las leyes estadounidenses.

Dicho esto, también debes saber que el proceso de evaluación y asignación de la patria potestad en estos casos suele ser un poco más sencillo que cuando hay un divorcio de por medio. No obstante, igual se evaluarán los aspectos que mencionamos en el apartado anterior: la estabilidad, los deseos y la relación entre las partes.

Entonces, ¿cuál es el procedimiento más común durante la asignación de la tutela? De esto hablaremos en la siguiente información.

Reconocimiento de paternidad

Cuando una pareja tiene un hijo, se asume de manera automática que el esposo es el padre del infante. Sin embargo, cuando no hay una boda, será necesario determinar legalmente la identidad del progenitor.

Aunque en la mayoría de los casos basta con presentar al niño al momento del nacimiento, algunos estados de USA exigen una declaración jurada en la que se especifique la identificación del padre del infante. Incluso, es probable que algunas regiones pidan que este documento esté notariado para darle validez legal.

Acuerdo de custodia

Una vez que el estado conozca el nombre del progenitor del niño, se puede presentar un acuerdo de custodia. Pero, ¿de qué se trata este convenio? Este documento no es más que la presentación ante los tribunales del resultado que tienen los debates extrajudiciales.

Entonces, ¿esto es legal? Por supuesto que sí. Cuando los padres no son casados (e incluso cuando están en medio de un divorcio tranquilo), existe la posibilidad de que ellos o sus partes autorizadas (abogados, por ejemplo) conversen usando distintos métodos de gestión de conflictos.

El derecho colaborativo y las mediaciones son los más comunes, y también los más fructíferos. En este sentido, debes saber cuáles son los puntos que deben ir explicados en el acuerdo de patria potestad:

  • Lugar de vivienda del infante.
  • El encargado de las decisiones más cruciales de la crianza del hijo, como podrían ser el colegio donde estudiará, la religión que profesará y el cuidado de su salud.
  • Cronogramas detallados de manera exhaustiva sobre la distribución del tiempo del niño con cada uno de sus padres. Horarios de visitas, reuniones en la academia y acompañamiento en actividades extracurriculares son solo algunos de los puntos que se deben incluir.
  • La división del tiempo durante las fechas importantes como feriados, celebraciones y cumpleaños.
  • Régimen de visitas con otros familiares; abuelos, tíos, primos y demás parientes maternos y paternos.

Como es de esperarse, este acuerdo debe presentarse por escrito ante el tribunal y, muchas veces, también requerirá de una reunión ante un juez de custodia para evaluar si las partes accedieron a todos los términos de manera voluntaria.

Además, la ley estadounidense debe confirmar que el acuerdo es justo con las condiciones de cada padre, y después de ver que todo está en orden, el documento quedará como una especie de decreto que debe ser cumplido.

Este convenio también puede cambiarse en cualquier momento, y para ello se hará una nueva solicitud ante el juez encargado del caso.

Tipos de custodias

Ahora que ya conoces los parámetros que se toman en cuenta al comenzar el proceso de evaluación y final resolución de una tutela, es momento de que sepas cuáles son sus tipos y qué conlleva cada uno de ellos. De manera general, podemos dividirlos entre custodia legal, custodia física y custodia compartida.

A su vez, cada una de ellas tiene variables que también tendrás que mirar, y todas ellas te las explicaremos a continuación.

Custodia legal

Este tipo de patria potestad es la que determina cuál de los padres será el encargado de tomar las decisiones más relevantes de la crianza de un niño. Como mencionamos anteriormente, la educación, la creencia religiosa y los cuidados médicos son los aspectos más cruciales que se discuten en este dictamen.

En este sentido, el progenitor encargado de la custodia legal tendrá el derecho de decidir, por ejemplo, dónde estudiará el menor, sus horarios dedicados a actividades extracurriculares y, en general, cualquier aspecto que garantice el bienestar del infante.

Además, debes conocer que la custodia legal puede ser convenida entre las partes antes de llegar a los tribunales, tal como lo explicamos antes. Por supuesto, esta tutela no excluye al otro progenitor de sus derechos sobre su hijo, pero la aprobación estará en manos de quien tenga la custodia legal.

Custodia legal compartida

En caso de que los progenitores no hayan llegado a un acuerdo antes de presentarse ante el juez, o si el proceso de divorcio se torna complicado, lo más probable es que el veredicto establezca una custodia legal compartida.

De hecho, no podemos dejar de mencionar que gran parte de los estados de USA prefieren que ambos padres compartan este tipo de tutelas. Evidentemente, esto no aplicará cuando alguno de ellos no esté en condiciones de tomar decisiones basadas en el bienestar y en el mejor porvenir de el o los infantes.

Cabe destacar que aun cuando uno de los padres tenga la custodia física completa (de la que hablaremos más adelante), el otro progenitor igual puede participar en la tutela legal compartida. Por ende, sus derechos de elección sobre la crianza de su hijo se mantienen protegidos aunque no vivan en la misma localidad.

Otro punto que no podemos dejar de resaltar es que si la custodia legal compartida es el dictamen de un tribunal, el padre que tenga la tutela física no puede oponerse a la intervención del otro progenitor. Si eso sucede, la parte afectada podrá pedirle al juez que abra el caso para debatir los términos de nuevo.

Custodia física

Por su parte, este tipo de custodia es la que se encarga de determinar cuál de los padres es el más apto para vivir con el niño. Generalmente, en estas tutelas predomina la estabilidad económica, aunque no se descarta —por ningún motivo— las facultades mentales de los progenitores al momento de hacer la evaluación.

Además, en este punto también se toman en cuenta si hay otras personas viviendo en la residencia y cuál es la conexión que tendrán con el niño.

Si los padres no han vivido juntos (es decir, no estuvieron casados o no tuvieron una relación de pareja) antes de comenzar el proceso de custodia, lo más seguro es que el niño siga en la residencia donde ha estado hasta ese momento.

Claro está que esta resolución puede tener excepciones como, por ejemplo, que el progenitor en cuestión no tenga las posibilidades económicas o físicas para darle una buena calidad de vida al infante. En todo caso, el padre encargado de la tutela física será denominado «progenitor custodio» y el otro será el «progenitor no custodio».

Custodia física compartida

Ahora bien, ¿qué pasa cuando el niño ha vivido con sus padres durante toda su vida o pasa mucho tiempo en las casas de ambos? En ese contexto, lo más beneficioso para el infante es la custodia física compartida. Cuando ocurren estos casos, el tribunal distribuye el tiempo en partes iguales para que pueda vivir con ambos padres.

Evidentemente, esta dinámica resulta mejor cuando los padres viven cerca, y si no es el caso el tribunal tendrá que evaluar cómo será la distribución del tiempo para no alterar la rutina del niño.

Asimismo, en las custodias físicas compartidas también se analizan los horarios escolares y otras actividades con las que tenga que cumplir el infante.

Custodia total

Ya hicimos referencia a que los estados de USA prefieren incluir a ambos padres en las custodias de sus hijos, ¿no es así? Sin embargo, no podemos dejar de mencionar que algunos contextos no permiten la inclusión de progenitores con problemas en las tutelas.

En estos casos los tribunales pueden otorgar la custodia física total a uno de los padres. Por supuesto, esta resolución solo puede tener efectos después de que los abogados y el juez encargado hayan probado suficientes causas determinantes para que uno de los padres deba quedar fuera de las decisiones de su hijo.

Algunos ejemplos claros que pueden evaluar esta situación son los abusos infantiles, la violencia doméstica, la adicción al alcohol o a las drogas y otros problemas similares.

No obstante, es poco común que la custodia legal quede en manos de solo un progenitor, así que lo más seguro es que el otro padre igual pueda decidir sobre la educación, la religión y la salud de su hijo.

¿Se puede perder la custodia de un hijo?

Ya explicamos que existe la posibilidad de que uno de los padres se quede sin la custodia física de su hijo, pero la verdad es que también puede perder la tutela legal en casos extremos.

Aunque las leyes estadounidenses velan por el bienestar del menor y el derecho de los padres, también tienen sentencias serias para quienes incurran en faltas.

En este sentido, perder la custodia legal o física de un menor puede ser una condición temporal o indefinida, dependiendo de cuáles fueron los motivos que las causaron. Además, se toma en cuenta la actitud del o de los padres después de perder la tutela del menor, pues los tribunales están abiertos a evaluar mejoras en sus comportamientos.

Antes de hablar sobre las causas que ameriten la pérdida de la custodia para un padre, es necesario mencionar que los servicios sociales estadounidenses pueden hacerse cargo del infante si ninguno de los 2 progenitores tiene la capacidad de cuidarlo. Dicho esto, ahora sí hablaremos de los motivos.

Causas más comunes

A los problemas de alcoholismo, adicción y violencia que ya nombramos en este artículo debemos sumarles otras afecciones mentales que conlleven a un tratamiento largo e invasivo para el padre. Asimismo, el progenitor puede ser excluido si no cumplió con el periodo de rehabilitación impuesto por sus médicos tratantes.

La patria potestad también puede verse afectada, como es de esperarse, si el padre fue sentenciado a cumplir una condena en la cárcel, o si incumplió las responsabilidades especificadas en el documento de la custodia inicial.

Causas más graves

Las leyes estadounidenses son aún más severas cuando hay sucesos más graves que los que acabamos de explicar. Dentro de ellos podemos mencionar el abandono de los hijos menores de edad, la violencia directa en contra del niño, consumo de drogas frente a él e incluso el abuso sexual.

En este último caso, si se demuestra con pruebas lo suficientemente convincentes y avaladas por un médico, el padre no solo perderá la custodia del infante, sino que también puede enfrentar penas severas en la cárcel.

EmigrarUSA no es un bufete de abogados ni proporciona servicios legales sobre las tutelas en Estados Unidos. La información presente en este artículo tiene la finalidad de resolver las dudas de los lectores respecto al trámite de custodias de menores en este país.

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